Existen muchos mitos con relación a la reproducción, en donde en la mayoría de los casos las mujeres son las que no logran cumplir con la norma o con las expectativas, pero va mucho más allá de eso, existen muchos temas alrededor de la fertilidad en general que hay que conocer y tomar en cuenta para poder decidir y comprender en lo que consisten los métodos de reproducción y más importante, la necesidad de la persona y pareja de realizar éste proyecto de vida.
Mito
1 “ Las mujeres son las causantes de los problemas de infertilidad
en la pareja”.
No hay
nada más alejado de la realidad que ésto, sin embargo la principal
pregunta cuando se comienzan con los problemas de fertilidad es
“¿quién tiene la culpa? Según estadísticas de la Sociedad
Española de Fertilidad el porcentaje en cuanto a alteraciones
seminales equivale a un 35%, en la ovulación un 25% mientras la
combinación de ambos factores abarca hasta un 60%. Sin embargo un
consejo que podemos darles a las parejas es que asuman el proyecto,
el reto y la inclusión en partes iguales, no con la responsabilidad
cayendo sobre una sola de las partes, aquí no hay culpables.
Mito
2 “Un embarazo se logra a la primera”
El
mito número dos va asociado al miedo mismo por tener un embarazo no
deseado, pero no es una regla, la probabilidad de quedar embarazada
en un primer intento o en 10 es totalmente incierta, no ha logrado
nadie explicarlo. Sin embargo también es cierto que hay parejas que
han conseguido un embarazo a la primer relación sexual, a la
“primera vez” pero en ésto existen variantes como los ciclos
menstruales. Si te sirve para tranquilidad, es un porcentaje bajo en
el cual se logra un embarazo al primer intento.
Mito
3 “Si quieres quedar embarazada debes mantener relaciones
diario”
Hacer “la
tarea” todos los días con tal de conseguir un embarazo no es la
mejor opción. ¿Sabías que el esperma pierde su calidad y volumen?,
pues así es físicamente y si cambiamos al plano emocional,
convertir la intimidad en un deber no es la mejor opción para la
pareja. En todo caso, un especialista podría aconsejar “programar”
las relaciones de acuerdo al periodo de ovulación llevando un
seguimiento del ciclo menstrual.
Mito
4 “Tomar pastillas anticonceptivas guarda efecto que afecta la
fertilidad”
Este es uno
de los más grandes mitos,
pues se tiene la creencia de que si tomas pastillas, el efecto
perdurará mucho tiempo afectando el poder concebir, las cosas no son
así exactamente, lo que si puede pasar es que el cuerpo puede tardar
entre dos y tres meses en volver al ciclo habitual pero tampoco es
una regla, en términos de fertilidad puedes utilizar pastillas
durante años sin que la fertilidad se vea afectada. Hay casos en
donde semanas después de interrumpidas las pastillas se logra un
embarazo, puede suceder si se coincide con la ovulación, pues las
pastillas tienen una curva de inicio y final de su efectividad que
caduca cada 24 hrs.
Mito
5 “La reproducción asistida es garantía de un embarazo”
Las
tazas de éxito en casos de fecundación in vitro, por ejemplo es
entre el 40 y 50 por ciento. Hay que considerar el número de
intentos , con ovocitos donados el éxito aumenta sus probabilidades.
Cada caso es único, existen estadísticas pero cada paciente es
diferente.
Mito
6 “Los bebés nacidos de algún método de reproducción asistida
pueden venir mal”
La
ciencia reproductiva ha avanzado mucho desde que se implementó y hay
puntos de vista muy contradictorios al respecto, pues a comparacíón
de los primeros intentos los métodos son menos invasivos. Lo que se
debe tomar en cuenta es la salud del paciente, su expediente,
antecedentes y llevar un estricto seguimiento por parte del
especialista que te ayude a tomar las mejores decisiones en cuanto al
método que elijas según tu caso en particular.
El tener un problema de fertilidad no es cosa de mujeres, o cosa de hombres, no hay un culpable, es un proceso que se debe llevar en pareja con la firme convicción de lograr un sueño, pero también considerando ser realistas y objetivos, la medicina avanza, y aunque no es una garantía, tener la información y las herramientas correctas ayudan a que los resultados sean siempre más favorables.